Ingrediente natural de amplio espectro con propiedades terapéuticas excepcionales. Su potente acción antiviral, antibacteriana, antifúngica y antiinflamatoria lo convierte en un aliado clave en el tratamiento y prevención de infecciones en la piel, especialmente en pies propensos a hongos y bacterias.
Además de sus efectos antimicrobianos, el Árbol de Té tiene un notable poder antioxidante, que ayuda a combatir los daños causados por los radicales libres, promoviendo una piel más sana y rejuvenecida. También se destaca por su suave efecto anestésico local, proporcionando alivio rápido en áreas inflamadas o irritadas, y por su capacidad cicatrizante, acelerando el proceso de curación de la piel y favoreciendo la regeneración celular. Estas propiedades hacen del aceite de Árbol de Té una opción eficaz y completa para el cuidado intensivo de los pies.