Ingrediente altamente efectivo y natural que se utiliza en cosmética debido a su potente capacidad para absorber toxinas, impurezas y exceso de grasa de la piel. Actúa como un imán que atrae y retiene las partículas contaminantes, dejando la piel limpia y purificada. Esta acción detoxificante es ideal para pieles propensas a la obstrucción de poros y el acné, ya que ayuda a desintoxicar profundamente la piel, mejorando su claridad y luminosidad.
Además de su capacidad para purificar la piel, el carbón refuerza la barrera cutánea y contribuye a la reducción de poros dilatados, dejándola con una apariencia más suave y uniforme. Su acción exfoliante suave elimina las células muertas de la superficie, lo que favorece la renovación celular y estimula la producción de nuevas células, reparando la piel desde adentro. Gracias a estas propiedades, el carbón es un aliado perfecto para mantener la piel saludable, equilibrada y libre de impurezas.